viernes, 30 de noviembre de 2012

De vuelta





Ver más allá de lo imaginable, creer mucho más de lo que realmente es posible, sentir el temblor de tu propio cuerpo al hallar el camino que creías perdido.
Cuánta gente no habrá intentado conseguirlo por diferente medios y sin embargo fue en vano el intento.
Cuántos laberintos se habrán recorrido a ciegas intentado conseguir lo imposible.
Cuántos sueños se habrán corrompido intentando ver lo inimaginable.
Necios. Nunca abrirán los ojos; nunca desvelarán su corazón.
Sabéis cómo ver más allá de lo mundano? Sabéis cómo resquebrajar la neblina de vuestra mente?
No son necesarias cosas grandiosas, ni magnificencias sobrehumanas ni estelas divinas. No hacen falta trucos de magia ni fuegos artificiales.
Solo hay que buscar en la simplicidad de lo que nos hace felices.
Yo conseguí ver más allá de lo que mi vista permitía con cada verso que derramaba sobre un papel.
Conseguí creer en lo imposible con cada estrofa que componía.
Y temblé con cada uno de los poemas que en mi corazón terminaba.
Porque peor que estar ciego, es tener vista y carecer de visión.